La retopología en infoarquitectura contribuye a optimizar un modelado 3D para crear visualizaciones hiperrealistas. Te contamos cómo aplicarlo

El modelado 3D está cada día más presente en nuestra sociedad porque abre un gran abanico de posibilidades a disciplinas tan dispares como la industria de los videojuegos, la ingeniería, la medicina y, por supuesto, la infoarquitectura. Para desarrollar modelos en tres dimensiones disponemos de múltiples recursos y estrategias, una de las que está cobrando más importancia es la retopología en infoarquitectura.

Antes de entrar de lleno en el concepto de retopología de la malla vamos a explicar brevemente en qué consiste el modelado 3D. Esta tecnología se basa en dibujar todo tipo de elementos (desde edificios a objetos o personajes) en los tres ejes o direcciones de un espacio (ancho, largo y alto o x, y, z) para obtener esa sensación tridimensional. Los modelos en 3D están compuestos por polígonos que se forman a partir de vértices (puntos que marcan la posición en las tres dimensiones) y aristas (líneas que unen dichos puntos). 

La visualización 3D en arquitectura permite diseñar múltiples objetos con gran lujo de detalles y hacer que “cobren vida”. Para eso utilizamos cada vez más la retopología. ¿Quieres conocer qué es y para qué sirve la retopología 3D en infoarquitectura? En este artículo te explicamos sus características, aplicaciones y beneficios.

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¿Qué es la retopología de objetos en 3D?

La retopología de la malla es un proceso básico para la optimización de modelos en tres dimensiones que nos permite trabajar de forma más ágil y eficiente. Consiste en redibujar una malla de polígonos simplificada a partir de una forma en 3D ya existente para reducir su número de vértices y aristas

Es decir, pasamos de un modelo de alta poligonización a otro de baja poligonización quedándonos únicamente con los que necesitamos para crear nuestra propia plantilla. Así podemos disminuir el peso y la velocidad de carga del objeto en 3D para controlarlo mejor. 

Para comprender mejor cómo funciona este proceso de retopología, imagina que quieres envolver perfectamente un objeto en 3D con una hoja cuadriculada (recuerda los vértices y aristas). Entonces descubres que tu objeto presenta formas muy irregulares, por lo que es más difícil de cubrir. En estos casos, la retopología te permite crear una malla uniforme completamente optimizada para cada diseño, como un traje hecho a medida, incluso en los modelos complejos

¿Para qué sirve la retopología en infoarquitectura?

Si tenemos en cuenta que los objetos en 3D incorporan cada vez más detalles, no es difícil percatarse de que pueden llegar a estar formados incluso por millones de polígonos. Por eso es necesario realizar el proceso de retopología. De otra manera sería muy difícil trabajar. Así es como la retopología se ha convertido en un recurso cada vez más utilizado en infoarquitectura. 

Esta técnica digital permite explorar los límites del modelado 3D de una manera más accesible porque disminuye la carga poligonal, lo que se traduce en una mayor eficiencia del motor de renderizado o visualización arquitectónica que utilicemos posteriormente. Es decir, merece la pena invertir tiempo en realizar la retopología. 

En el caso de la infoarquitectura, como en otras industrias, obtenemos algunas ventajas importantes utilizando esta técnica. Al reducir el peso digital del objeto manteniendo una calidad y una funcionalidad suficientes, este se vuelve más manejable, lo que facilita su manipulación posterior. Es decir, logramos una optimización del modelo en 3D. ¿Y en qué consiste esta manipulación? En procesos como la texturización o la animación, que son indispensables para obtener un buen resultado final.

¿Cómo aplicamos la retopología a la infoarquitectura?

Una vez que se han creado modelos tridimensionales de los objetos o espacios que queremos representar -se pueden utilizar diversas técnicas, como la fotogrametría o el escaneado láser- es el momento de empezar a retopologizar. En la actualidad existen programas capaces de automatizar la retopología, lo que agiliza y simplifica el proceso. Sin embargo, a la hora de hacer animaciones es preferible  llevar a cabo una retopología manual para que los resultados sean óptimos. 

La retopología manual implica crear una carcasa que imite la silueta del modelo sin detenerse en los pequeños detalles. Aunque se trate de un proceso más lento y laborioso, proporciona al diseñador un mayor control sobre los retoques que ha ido haciendo sin necesidad de utilizar ningún programa. Así se obtiene un resultado más preciso del modelado 3D, lo que facilita dotar de realismo a los renders. 

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